Capitulo 14 TERCERA TEMPORADA

-Porfin en casa.-Dije tirandome al sofa.
-Eres un bruto, sabes?.-Dijo Beca tirandome un cojín.
-Es por el cansancio.
-Claaroo. Me voy a duchar.
-En un rato subo.-Dije arqueando las cejas.
-Pervertido.-Sonrió.
Me quedé allí, tendido en el sofa. Cuando casi estaba dormido, comenzé a escuchar unos gritos provenientes del piso de arriba.
-Zayn!.-Gritaba.
Cogí lo primero que pillé y subí rapidamente las escaleras.
-Que pasa!.-Dije entrando en el baño.
-Que... Por qué traes una vela?.-Dijo abriendo un poco la cortina.
-Es lo primero que he cogido.
-Te iba a decir que a que burro has bañado que me has gastado todo el acondicionador.
-Uf, solo era eso.
-Solo eso? No me digas que te has gastado mas de medio bote.
-Crees que mi pelo es así de forma natural?
-Mañana me vas a comprar uno.-Cerró la cortina.
-Me abres un hueco?
-Has cerrado la puerta de la calle?
-No.
-En ese caso no. Cualquiera podría entrar en la casa.
-Tranquila, ahora hay mas guardias vigilando en la entrada.
-No les he visto.
-Porque están escondidos.
-Son de fiar?
-Si.
-Entonces porque has pensado que alguién me estaba... Lo que se te haya pasado por la cabeza.
-No se, porque esos gritos que has dado no son normales alomejor.
-Ya, seguro que se hubiera llevado un gran golpe con esa vela.
-También traigo mis puños.
-Mi heroe.-Ironizó.
Me quité la ropa y me metí en la ducha.
-Ahora te vas a enterar.-Dije agarrandola por la espalda.
-Sh, creo que escuché algo.
-Buen intento.
-Enserio.-Me tapó la boca y cerró el grifo.
Estuvimos un rato en silencio y no volvimos a escuchar nada.
-No pasa nada, le diré a un vigilante que dé una vuelta por la casa.
-Vale.
Salí de la ducha, me asomé a la ventana y dí la orden.
-Ya te puedes tranquilizar.
-Mientras sigamos aquí, no estaré tranquila.-Dijo enrollandose en una toalla.
-Voy a terminar de ducharme.
-Yo voy a hacer la cena.

(...)

Me vestí y bajé al salón.
-Que hay de cena?
-Cual es la comida favorita del señor?
-No me digas que has hecho pollo.-Dije abriendo el horno.
-Solamente porque me has regalado este fabuloso collar.-Sonrió.
-Pues si esto es así... Te regalaré uno todos los días.-Le guiñé un ojo.
-Por mi bien. Oye, tengo la extraña sensación de que nos vigilan...
-Otra vez?
-Lo siento, no puedo evitarlo.
-No pienses en eso.
-Lo intentaré.
-Bueno venga, cenemos.
-Vaale.
-Que hambre.
-Haber, ayudame con esto.
-Mmm, patatas.
-Te van a encantar.
-Viniendo de ti, no me extraña.

(...)

Después de cenar y recoger la mesa, decidimos salir un rato al jardín. Invité a Max para que viniera sin saber que Beca había invitado a Lind. Sin duda hoy iba a ser la noche. No sé como pero tenían que solucionar las cosas de una buena vez. Cuando Max llegó ya Lind estaba en casa.
-Que hace ella aquí?.-Dijo Max.
-Eso mismo me gustaría saber a mi.-Respondió Lind.
-Por qué no dejais de comportaros como idiotas?.-Dije.
-Eso, que despues nos deciaís a nosotros.-Dijo Beca.
-Es que yo con este nunca voy a poder solucionar absolutamente nada!.-Gruñó Lindsay.
-El sentimiento es mutuo.-Contestó Max.
-Pero mira que sois cabezotas.-Dijo Beca.
-Y si los encerramos en algún sitio?.-Propuse.
-Me parece buena idea.-Contestó Beca.
-Vosotros estais locos!.-Gritó Lind.
Max estaba mirando algo fijamente.
-Que pasa?.-Dije.
-Me ha parecido ver una sombra.-Contestó.
-Ves que no era problema mio.-Dijo Beca.
-Ya me estais asustando.-Dije.
-Chicos, quedaros aquí esta noche.-Dijo Beca.
-Bueno, vale.-Dijo Lind.
-Está bien.-Contestó Max.

(...)

|Maratón, capitulo 2/3|